Si sos mamá, de seguro alguna vez has pensado: ¨recuerdo cuando tenía tiempo para mí, para hacer ejercicio, para cuidarme, para chinearme, para ir al baño tranquila, inclusive para contestar un mensaje de whatsapp¨.

Te comentamos que no eres la única, muchísimas mamás al igual que vos sacrifican día a día el tiempo personal para dedicarse a las necesidades de sus hijos. Y es que ser mamá es una tarea de tiempo completo, pero además debes saber que el tiempo que te dediques a ti misma también es importante.

Tus hijos no solo necesitan una mamá que los cuide, juegue y comparta con ellos, es necesario que sea una mamá sana, con buenos hábitos y con una buena salud emocional; porque a fin de cuentas eso es lo que le vas a transmitir a tus hijos y esos hábitos son los que ellos van a aprender y aplicar en la vida conforme crezcan.

Si bien es cierto no todas las familias son iguales, ni tienen las mismas rutinas, ni las mismas prioridades, existen aspectos básicos que debes organizar para poder sacar un ratito para ti, eso sí siendo conscientes de las capacidades y limitaciones según cada familia.

Analizando la situación desde una perspectiva cultural y de género, también las mujeres enfrentamos un reto importante en cuanto al rol que jugamos como madres, ya que la creencia de que las mamás deben ser las principales cuidadoras de los niños aún se encuentra arraigada en nuestra sociedad; “estas ideas sobre la familia y el rol de la mujer, consagradas desde tiempo atrás y concebidas como el orden “natural” de las cosas, apenas están comenzando a cambiar lentamente”. (Binstock, 2008).

Por todo esto te dejamos estas recomendaciones:

• Organizá tu tiempo: establecé prioridades, haz una lista de las actividades diarias, luego clasificalas en orden de importancia o de urgencia y organizate con una agenda o un planificador. Eliminá todas aquellas actividades que considerés te están robando tiempo de calidad para vos.
• Delegá tareas y pedí ayuda: de seguro para algunas es difícil sentir que no tiene el control de todo en casa, a veces es necesario repartir las tareas entre los miembros de la familia o pedir ayuda a quienes sabés estarán ahí en caso de ser necesario.
• Desconectate de los aparatos electrónicos: en el mundo que vivimos es normal estar pendientes de la computadora, el celular, la tablet y demás aparatos electrónicos, pero una buena práctica es desconectarse de todo eso durante un rato en el día, esto te permitirá descansar de la tecnología y dedicar ese tiempo para realizar otras actividades que le generen bienestar.

El tiempo personal y el tiempo de ser madre debe ser un balance; dejá la culpa de lado, dedicate un rato para ti no te hace mala mamá, al contrario, te brinda salud y bienestar que vas a trasmitir a tu hijos para ser cada día una mejor persona, mejor mujer y mejor mamá.