30 enero, 2023

Bienestar

Colocar hielo, ¿realmente ayuda?

El frío es un elemento que puede producir grandes ventajas tras una lesión o una dura sesión de entrenamiento.

Es bien conocido que tras un duro entrenamiento o justo al sufrir una lesión es habitual colocar hielo de forma local. La aplicación de este elemento físico para, de alguna manera, contrarrestar una lesión, ha demostrado tener varios efectos positivos a la hora de limitar el daño sufrido.

Para analizar los efectos de colocar hielo sobre una lesión en cuanto aparece, se debe entender los efectos del frío sobre el cuerpo de manera general.

  • Se ralentiza la circulación. El frío causará una vasoconstricción local, es decir, que los vasos sanguíneos disminuyan su diámetro en el lugar donde lo aplicamos. Por lo tanto, llegará un menor volumen de sangre.
  • Efecto analgésico. Congelar una lesión hace que se entumezca la zona, disminuyendo la capacidad de los transmisores del dolor de ejercer su función. Por lo tanto, no se nota el mismo dolor que sin el uso de este elemento.
  • Ralentización del metabolismo. Los procesos celulares tienen lugar de manera más lenta. Esto también hace referencia a la circulación más lenta y la debilitación de las señales nerviosas.

La ralentización de la circulación va a jugar un papel importante a la hora de limitar el daño a nivel sanguíneo. Concretamente, el frío junto con la presión, va a limitar notablemente el edema que sufra el paciente. El frío limita la permeabilidad de los tejidos, y al haber menor cantidad de sangre, la cantidad que saldrá de los vasos sea significativamente menor.

Por otra parte, que disminuya la circulación también tendrá efecto a nivel inflamatorio. Junto a la limitación del edema, como hemos visto antes, esta la principal razón por la cual al frío se le atribuye un fuerte efecto antiinflamatorio.

El efecto analgésico también será clave al sufrir una lesión. Así, podremos limitar el dolor que siente el paciente y hacer que llegue en las mejores condiciones posibles al centro médico para que le hagan pruebas.

Por todo lo anterior, será indicado colocar hielo o aplicar frío:

  • Al finalizar una sesión de entrenamiento. En este caso, el frío servirá para relajar al músculo, así como limitar cualquier posible daño que haya sufrido (microrroturas, inflamación…).
  • Lesiones agudas. Hablamos de esguinces, torceduras, etc.
  • Dolencias o patologías cutáneas que cursen con dolor y/o picor.
  • Edemas o lesiones en fase hemorrágica.

MÁS DE BIENESTAR

Conseguí una piel de ensueño

Leer más

Con tanta gripe, hay que prevenir

Leer más

Beneficios de las farmacias online

Leer más