Sí, te hablamos del té verde, que es catalogado como elixir de la eterna juventud y además un excelente aliado de la pérdida de peso. Su consumo también se relaciona con una cantidad alta de antioxidantes y de bondades para el organismo a nivel físico y  mental.

Se dice que este té se descubrió hace más de 5.000 años y que está ligado a la cultura oriental, siendo producido en China, India y Turquía.

Su nombre proviene del color pálido que adquieren sus hojas en el proceso y fermentación del té, que posee catequenia, un antioxidante y complemento termogénico que ayuda a incrementar el metabolismo celular, quemar grasas de forma rápida y reducir la capacidad natural de absorción de grasas sin riesgo cardiovascular.

Acá te mencionamos más beneficios de este:

• Ayuda a combatir el estrés. Esto se le debe a un aminoácido llamao L-teanina, que tiene efectos relajantes sin provocar sueño. El ejercicio y el té son buenos aliados para no padecer estrés, que puede ser perjudicial para el sistema inmune y a nivel mental y físico.
• Ayuda a relajar el cuerpo.
• Posee efectos anti-cancerígenos debido a la alta cantidad de antioxidantes y ponifenoles, una sustancia que evita la formación de radicales libres y la producción de células cangerígenas.
• Ayuda a aumentar el metabolismo, para prevenir la obesidad.
• Ayuda a proteger el corazón y el cerebro de enfermedades vasculares.
• Mejora el sistema inmunitario.
• Ayuda a prevenir la enfermedad de Alzheimer. El té verde contiene catequiza y compuestos bioactivos que generan efectos protectores sobre las neuronas, reduciendo así, el riesgo a algún transtorno.
• Ayuda a controlar la diabetes y a prevenir la fibrosis hepática, por lo que es beneficioso para quienes manejan puntos altos de insulina, diabetes tipo II y otras enfermedades relacionadas con los niveles elevados de azúcar en la sangre.
• Combate el envejecimiento, esto se debe a que posee antioxidantes y propiedades antiinflamatorias.
• Mejora el aspecto de la piel y de las uñas.

Para consumirlo, solo basta utilizar agua a una temperatura de entre 70°C y 80°C e infusionar las hebras entre 1 y 2 minutos, dependiendo del té. Si utilizás saquitos nunca superes los 50 segundos de infusión, ya que tu té se volverá muy amargo y astringente.