20 abril, 2023
Bienestar
Para hablar de los beneficios del láser, hay que saber exactamente qué es. La laserterapia consiste en enviar un rayo electromagnético a una zona específica del cuerpo para obtener un efecto determinado.
Dependiendo la longitud de onda y la potencia de este rayo se conseguirán unos efectos u otros. También se conseguirá llegar a distintos tipos de tejidos. Esta variabilidad es una de los puntos fuertes de la terapia.
Ahora sí, veamos los beneficios:
Debido a su naturaleza, al alterar los parámetros del láser estará mandando un rayo capaz de atravesar distintos tejidos. Esto permitirá trabajar sobre distintos elementos del cuerpo según necesidad. Así, se puede llegar a las articulaciones, tendones o músculos.
Este es el principal uso que se le da al láser en fisioterapia. El efecto más notorio de acelerar el metabolismo es ayudar a la cicatrización. Al aplicarlo en los alrededores de una herida, se estimula el tejido. También se evita que se produzca tejido fibroso, el cual puede causar cicatrices poco móviles que tengan otros efectos nocivos.
Además de acelerar el metabolismo, también habrá vasodilatación local. En este sentido, es parecido a la termoterapia, o el uso del calor. Este efecto también es importante para la recuperación del tejido dañado y para eliminar posibles sustancias nocivas.
Este beneficio se obtiene a consecuencia del anterior. Al igual que el calor, al aumentar el riego sanguíneo y favorecer la recuperación de los tejidos, también se obtiene un gran efecto antiinflamatorio.
Sin embargo, al igual que con la termoterapia, solo buscará aplicar el láser en situaciones de inflamación crónica. Es decir, pasadas 48-72 horas desde la aparición de la inflamación.