La naranja es fuente de vitamina C (también llamada ácido ascórbico). De hecho, una naranja mediana aporta alrededor de 82 mg de vitamina C. ¡Más de la dosis diaria recomendada!

Además, la naranja aporta folatos, necesarios para la formación de las células sanguíneas, carotenoides con actividad provitamínica A y antioxidantes como la luteína y la zeaxantina. Pero eso no es todo, es también rica en flavonoides.

En los últimos años, se ha estudiado a la naranja y cómo su ingesta influye en el organismo del ser humano. Acá te dejamos sus beneficios:

1. Prevención de problemas oculares: un nuevo estudio ha concluido que aquellas personas que comen regularmente naranja tienen un 60% menos de probabilidades de desarrollar degeneración macular.
2. Disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares: otra investigación arrojó que las frutas cítricas podrían tener un efecto protector sobre el corazón, debido a su contenido de potasio y vitamina C.
3. Menor riesgo de accidente cerebrovascular en mujeres: en 2012 un estudio reveló que aquellas mujeres que consumen altas dosis de flavonoides tienen un 19% menos de probabilidades de padecer un ACV.
4. Mejoras en la función muscular y disminución de las molestias post ejercicio en aquellas personas que consumen 400 mg de vitamina C al día, según datos de otra investigación.