Las uvas además de ser deliciosas, son ricas en antioxidantes y muy integrada en la gastronomía. Acá te contamos un poco más de ellas:
- Son energéticas, contienen abundantes hidratos de carbono de rápida asimilación.
- Su índice glucémico no es alto, sino medio.
- Contienen vitamina C y betacaroteno.
- Entre sus minerales destacan el potasio, el cobre y el hierro, aunque también calcio, fósforo, magnesio, manganeso, azufre y selenio.
Dentro de sus beneficios se encuentran:
- Mejoran el estado de ánimo y ayudan a reponerse del cansancio.
- Ayudan al equilibrio glucémico de la sangre, porque estimulan el páncreas y la producción de insulina.
- Es un potente antioxidante que ayuda a combatir el envejecimiento prematuro creado por los radicales libres.
- Controlan la presión arterial, debido a su alto contenido en potasio.
- Debido a su alto contenido en fibra contribuye a potenciar un tránsito intestinal saludable.
- Su alto contenido en polifenoles puede reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular mediante la prevención de la acumulación de plaquetas y la reducción de la presión arterial a través de mecanismos anti-inflamatorios.
- Poseen un efecto diurético beneficioso en caso de hiperuricemia o gota y litiasis renal.
- Aportan energía ya que son una gran fuente de azúcares y carbohidratos.
- Previenen la espina bífida.
- Evita el desarrollo de células cancerígenas, puesto que la piel de esta fruta cuenta con un compuesto llamado resveratrol que ayuda al control de esta enfermedad.
- Las uvas contienen taninos y ácidos cafeicos, que son potentes bactericidas.