Enfermedades que ayuda a combatir el tomillo
- Indisposiciones digestivas: El tomillo alivia las digestiones pesadas, los espasmos gastrointestinales y la gastritis, y evita la formación de gases y flatulencias. Se toma en infusión simple o combinada dos tazas al día, en maceración en vino blanco y en tintura o jarabe.
- Afecciones respiratorias: Los catarros, procesos gripales, faringitis, laringitis, sinusitis, bronquitis y procesos alérgicos pueden aliviarse tomando una infusión de tomillo, sola o combinada con plantas que refuercen su acción hasta tres tazas diarias, o bien en jarabe, tintura y cápsulas.
- Dolor de garganta: Contribuye a aliviar la tos irritativa y la afonía, y descongestiona las vías respiratorias. Para ello se pueden realizar gargarismos a partir de su decocción simple, acompañada de zumo de limón y miel, o bien en vahos.
- Parásitos intestinales: Se toma en infusión, decocción, maceración, tintura, o bien se aplica en lavativa.
- Astenia, debilidad y convalecencia: Se administra en infusión, basta dos tazas al día, o en tintura.
- Hepatoprotector: Estimula la producción de bilis y protege las funciones del hígado, puesto que es un buen depurativo y desintoxicante. Se toma en infusión, tintura y en gotas de extracto líquido.
- Tensión menstrual y dolor muscular: Se toma en infusión, tintura o en gotas de extracto fluido.
- Infecciones urinarias: Su infusión puede aumentar la emisión de orina y constituye un buen depurativo, ya que favorece la eliminación de toxinas.
- Dolores musculares: El tomillo puede aliviar contracturas musculares, lumbalgias, esguinces, ciáticas. Basta con aplicarlo en forma de linimento o pomada, en decocción o maceración en alcohol de 96 º sobre la zona dolorida o bien en gotas de aceite esencial mezcladas con aceite vegetal. El aceite también se utiliza para practicar un masaje o para añadir en el agua del baño.
- Conjuntivitis alérgicas y rinitis: Se aplica en forma de baños locales y colirios.