La cantidad no es importante, lo que te debe de importat es que el lazo que tengan sea fuerte para afrontar tanto los momentos buenos como los malos.

El ser humano es social por naturaleza, ya que está rodeado de otros individuos y se relaciona con ellos durante toda su vida. En cualquier momento de la vida, las personas tienen un vínculo afectivo ya se con familiares, compañeros de trabajo, pareja y amigos.

Los lazos de amistad se van construyendo con el trascurrir del tiempo. Cuando somos niños los amigos son compañeros de juegos, en la adolescencia la amistad es complicidad y ayuda mutua para lograr objetivos. En la adultez los amigos se hacen por compatibilidad de intereses y proyectos de vida.

No todas las amistades son iguales, las conversaciones serán diferentes según el grupo social que te rodee, porque los intereses son variables. No hay tipos de amigos: todos forman parte de tu entorno y cada uno aportará cosas a tu vida.

Los amigos te brindan momentos increíbles que marcarán tu vida ya sean tristezas, alegrías, reuniones, viajes o cualquier circunstancia que se te presente en la vida. Hay amistades que perduran en el tiempo y otras que solo estarán por momentos específicos de tu vida: cada una de ellas hay que apreciarlas.

Además de todo esto que contamos también te traen estos beneficios:

• Tu autoestima y seguridad aumenta: con los amigos podés expresar lo que pensás y ser como eres, sin ocultar tu personalidad, además aumentará tu autoestima porque te sentirás amado y valorado.
• Expresarás tus sentimientos: los amigos te escuchan y aconsejan en el caso de requerirlo. Una palabra de aliento ayudará a controlar las emociones.
• Respetarás a los demás: en una relación de amistad existen diferencias de personalidades y pensamientos, cada uno tiene su carácter, una religión, ideas políticas y pueden ser compatibles o no. Respetá las diferencias de tus amigos, no juzgués y aceptalo con sus defectos y virtudes.