La miel de abeja además de usarse en diferentes platillos, también es un remedio natural. ¿Alguna vez la has usado para aliviar algún malestar? Acá te dejamos algunos de sus beneficios:
- Potencial antibacteriano: uno de los potenciales antibacterianos de la miel puede ser importante para el tratamiento de acné y para exfoliar la piel.
- Antioxidante: es un complemento dietético importante en la prevención de enfermedades cardíacas, del sistema inmune y de procesos inflamatorios.
- Contiene proteínas: contiene enzimas y aminoácidos.
- Potencial hidratante: no solo influye en su viscosidad, peso, sabor y color, sino que sirve para humectar distintas partes del cuerpo.
- Favorece la digestión: ayuda a metabolizar los alimentos, previniendo o aliviando indigestiones estomacales.
- Tratamiento de heridas y quemaduras: si se combina con otras hierbas, un ungüento de miel resultaba benéfico para quemaduras de sol, infecciones por heridas y manchas en la cara.
- Alivia la tos y el dolor de garganta: si se combina con el jugo de lima o limón, la miel de abeja alivia el dolor de garganta, incluso en pequeñas dosis.
Recordá que la miel de abeja se produce de manera natural por la Apis mallifera y distintas subespecies de abejas. Estas últimas obtienen la miel por el néctar de las flores y también por secreciones liberadas por las propias abejas.