Una de las claves para mantener un peso saludable es consumir un desayuno ligero todos los días. Como ya te lo hemos mencionado el desayuno es la comida más importante del día pues aumenta la sensación de ansiedad y ralentiza las funciones del metabolismo.
Preparar un desayuno ligero no tiene que ser sinónimo de recetas complicadas o de mucho tiempo de preparación, solo basta con hacer una buena elección y combinación de alimentos.
Te compartimos algunos trucos:
- Comer carbohidratos saludables: son los que provienen de alimentos energéticos como la avena, el pan de centeno o los copos de maíz. Su consumo no provoca alteraciones en los niveles de glucosa en la sangre y ayuda a prolongar la saciedad.
- Consumir proteínas con poca grasa: los alimentos de origen animal son una fuente principal de proteínas de alto valor biológico, también en este grupo de grasas se encuentran los frutos secos, semillas y legumbres
- Beber lácteos bajos en grasa: la leche, el yogur y otros derivados bajos en grasa aportan nutrientes esenciales.
- Consumir frutas y vegetales: son muy bajos en calorías y representa una fuente importante de vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra dietética.
- Nada de embutidos: están llenos de grasas saturadas, añadidos químicos y harinas que son perjudiciales.
- Incluí huevo: es un buen complemento para aumentar el nivel de energía y mejorar la productividad física y mental.