La edad no debería ser un impedimento, ni una excusa, para que no hagás ejercicios. Si tenés pensado empezar a correr después de los 50 años, sí deberás tener en cuenta ciertas recomendaciones.
Más que todo es para evitar lesiones o dolores y que podás disfrutar al máximo de la actividad.
Es muy probable que te encontrés personas que te digan que estás loco o muy viejo como para ponerte a correr, pero no tenés que hacerles caso. En cambio, rodeate de gente que te anime, que te permita superarte y que te apoye.
Acá te dejamos estas recomendaciones:
- Hace un chequeo médico: un chequeo general te orientará porque podrás saber si tenés el permiso para entrenar o, si se presenta alguna enfermedad o patología, acomodar el ejercicio a esa condición.
- Correr en grupo: te darán consejos, te apoyarán en las carreras (si es que decides competir)
- Ser moderado y consciente: al inicio es recomendable que vayás despacio, con ciclos de 2 o 3 sesiones por semana, y que intercalés entre correr y caminar a diferentes velocidades.
- La alimentación: un plan alimenticio adecuado, con el aporte de vitaminas y proteínas, no solo servirá para que corrás mejor, sino que también será beneficioso para la salud en general.