El juego es una de las principales herramientas para orientar y educar a un niño. A pesar de ello, la atención de los niños suele estar dispersa y no todos los juegos consiguen motivarlos.

Sin embargo, los ejercicios acuáticos pueden ofrecer un extra de motivación, debido a que la superficie y el medio cambian, y los niños pueden verlo como algo innovador. Esta es una de las principales ventajas de trabajar en sitios como una piscina.

Algunos de sus beneficios son:

• Desarrollo de las capacidades físicas.
• Aprendizaje significativo.
• Fortalecimiento de las relaciones sociales.
• Ayuda a la creatividad.

No importa la edad que tenga un niño, podés llevarlo desde meses de nacido a clases de natación.